Aún recuerdo cuando conocí a Dan, pasabamos el rato hablando de Lair Ribeiro y de temas de crecimiento personal. Eso me encantaba, de alguna manera me ayudaba a sanar mi corazón que había quedado bastante achicopalado después de mi relación anterior, y así entre chats, llamadas y sonrisas, un día, casi sin darme cuenta me dejó de doler ese vacío que sentía por dentro y comencé a llenarme de esperanza, de vida, de sueños.
Hoy se añade otro mes, de muchos que están por venir, a esta relación que poquito a poco me ha cambiado la vida y que se formalizó en una tarde llanera en Acarigua, después de haber viajado muchas horas para ver a la Virgen de Coromoto -y ya Dan va a decir que La Virgen lo ayudó- yo siento que algo mágico sucedió en esos días que nos llevó a unir nuestros caminos.
Hay tantas cosas que me gustan de Dan, que escribirlo sería una larga lista... a ustedes, lectores queridos, solo puedo decirles que el poder del amor puede transformar nuestra vida en un instante, solo basta tener los ojos abiertos y el corazón dispuesto... y a mi amado Dan, te dejo mil besos (o un beso fuerte) para que te acompañen en este día.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario